Tras varios meses sin actualizar este blog, confiados en que se iba a dar una solución de manera inmediata, vemos que la situación parece que se mueve del mismo modo que el año pasado, cuando a base de promesas, lograron callarnos hasta pasadas las elecciones municipales. Por tanto, creemos que ha llegado el momento de que os contemos qué está haciendo el Ayuntamiento en este caso.
Gracias a la presión de todos vosotros, con las visitas al blog, las firmas de solidaridad, y gracias a la presión de los medios de comunicación, en el mes de noviembre de 2007, el Alcalde de Rivas Vaciamadrid nos cita a los 5 afectados a una reunión con su gabinete jurídico. En esa reunión, nos comunica que ha conseguido "arrancar" un compromiso a Covibarges, en el sentido de que ellos van a adelantar una cantidad económica que, si bien no cumple nuestra solicitud de que nos permita liberar una de las hipotecas, permite paliar la misma. En dicha reunión, nos manifiesta que, Covibarges, no se siente en absoluto responsable de nuestra ruina, ya que nunca se le demandó (recordad que el abogado que llevó nuestro caso, se cuidó muy mucho de quitarnos esta idea de la cabeza). En este proceso, el Ayuntamiento actuaría de garante de nuestra deuda con Covibarges.
Agradecemos sinceramente la implicación, aunque tardía, de nuestro Ayuntamiento en la búsqueda de una solución, que nos consta ha sido muy complicada de conseguir.
Bueno, el hecho es que nos presentaron un documento que permitiría, tras su firma, el que pudiéramos volver a dormir con tranquilidad hasta que finalizase todo el proceso judicial. Documento que, tal como manifiesta el Ayuntamiento, es limpio, sin letra pequeña, y lo que pretende, lógicamente, es garantizar la recuperación del dinero cuando todo este esperpento finalice, y a la vez darnos esa tranquilidad que le demandamos.
Sin embargo, y tras el análisis de nuestro abogado de dicho documento, nos damos cuenta de que existe una claúsula "oscura", que supone que tendremos que devolver el dinero antes de que podamos ejecutar la futura sentencia, es decir en la peor de las posibles situaciones.
Nosotros llevamos desde primeros de enero, a través de nuestro abogado, intentando hacer entrar en razón al gabinete jurídico, para que se dé cuenta de que, hasta que logremos cobrar una indemnización por la sentencia, o hasta que se consiguiera finalizar la reconstrucción total de la vivienda en ruinas, nosotros no vamos a tener capacidad económica para devolver el dinero prestado.
¿Es mucho pedir que podamos reintegrar lo prestado cuando tengamos posibilidades económicas?. Nos parece que nuestra petición es lógica, puesto que sin capacidad económica, no podríamos cumplir con la devolución, y la capacidad económica la tendremos cuando se haya ejecutado la sentencia, o bien recibiendo una indemnización, o bien teniendo la casa reconstruída (y por tanto podríamos hipotecarla para devolver el préstamo).
Señor Alcalde, por favor, finalicemos este esperpento difinitivamente. Gracias.
Seguiremos informando.
